Hoteles en Colombia

Me gusto mucho dormír arrullada con el sonido del río y despertar con el sonido de las aves, es un lugar muy tranquilo, para desconectarse totalmente . Estaba en la habitación compartida pero como el hotel es bastante nuevo tuve la habitación solo para mi. Las zonas comunes son muy lindas, tomar el desayuno en la terraza con vista al río es espectacular .

Las instalaciones son espectaculares, pero habia algo que sobrepasaba la magia del lugar y fue la amabilidad del personal, el Señor Alvaro siempre muy pendiente de todo, la comida de Nadi muy buena y la amabilidad de Mile sin comparacion, salimos muy contentos. Estuvieron pendientes de los planes que queriamos hacer y nos ayudaron siempre a sacarlos adelante, salimos en kayak hasta cayo cangrejo, hicimos el bautizo en buceo, recorrido por la isla en mulita, lo unico malo fue que no nos quedamos mas tiempo.

Es un lugar precioso en medio de la naturaleza. La atención es excelente, superó nuestras expectativas. El paisaje frente a la cabaña del lago es único, excelente para desconectarse.

El lugar creado por esta arquitectura es bellísimo, todos los detalles muy bien cuidados, justo lo que uno espera cuando llega a un hotel de esta categoría. El personal es muy amable, todo el tiempo muy atentos. El desayuno era muy bueno, todos los días habían productos locales distintos. Había un menú de almohadas, las camas son cómodas. Definitivamente volveríamos.

La magia cobra vida en este onírico lugar. Es una experiencia continua desde la entrada. Cada detalle ha sido cuidadosamente pensado. La calma y la paz que se respira te permite la reconexión con tu interior. Fantástico.

Es un lugar perfecto para descansar y disfrutar de los Farallones.

Muy cómodo, un lugar muy acogedor con vistas hermosas

El servicio de Yesid y Danna fue excelente. La casa es súper linda y el desayuno estuvo perfecto! La ubicación también es muy buena y en general nuestra estancia fue muy agradable. Gracias por todo!

El mejor hotel de Jardin sin lugar a duda. Hemos ido varias veces y lo recomendamos para cualquier persona que vaya a Jardín

La calidez de Doris y César, siempre atentos, muuuuy amables y amorosos. Facilitaron todo lo que necesitamos, desde rentar una mula hasta prestarnos un rallador. Las instalaciones, bellas, muy cómodas y en un entorno que dan ganas de quedarse. Mucha vegetación cuidada y que hace del espacio, un lugar muy acogedor. Se puede ir caminando a playas muy disfrutables.

Muy bien y el personal todos muy atentos

La atención de todos..hasta de chocolate jejeje